Un terremoto de magnitud 7.5 sacudió la mañana del miércoles 3 de abril a Taiwán dejando cuatro víctimas mortales confirmadas hasta el momento y al menos 50 personas heridas, además de edificios y caminos colapsados, y deslizamiento de laderas montañosas.
El director del Centro Sismológico taiwanés, Wu Chien-fu, advirtió que este movimiento telúrico «es el más fuerte en 25 años» -luego del sismo de magnitud 7.6, registrado en septiembre de 1999, que dejó dos mil 400 muertos-, y su intensidad generó alertas de tsunamis en ese país asiático, Japón y Filipinas.
Hasta el momento se han suscitado varias réplicas del temblor, incluidas una de 6.5, otra de 5.7 y una más de 5.5. Según los primeros reportes hay inmuebles colapsados con gente atrapada en el interior, así como daños en puentes y el metro.
La zona más afectada es la ciudad de Hualien, donde bomberos de la isla reportaron las primeras víctimas mortales, dos de las cuales eran escaladores que estaban en la entrada del cañón del Parque Nacional de Taroko cuando fueron sepultados por una avalancha de rocas.
Taiwán se ubica en el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde ocurren la mayoría de los terremotos del mundo, por lo que su población realiza simulacros constantes para saber qué hacer y mantener la calma ante este tipo de eventos.
Las autoridades continúan trabajando en las labores de rescate de los pobladores afectados.